El ave es magnética
El escualo eléctrico
El caballo percepción
La rosa uterina
Tu mi mujer
Globo terráqueo que asientas mi poder
Tu estrechez la cuja de mi bandera
La bandada que oscurece el cielo es
mi pensamiento sibilino que va con ella
Las abejas son tropel
Las toninas rosado pastel
Las gorriones legiones
Mis ganas vorágine
Tu cuerpo la explanada
Los distingo océanos y sus mares
Recomponen mi cuerpo y mi alma
Saben que sin ustedes sería ímproba
la gesta de llegar incólume a ella
Las marismas están repletas
Los arrecifes multiformes
La sabanas un silbido sin retorno
Tu amor por mí es mi yo que se consume
Aidos vuelvo a tu austero culto
Mi amada Diosa, me fui vanidoso
Regreso vertical sin sinuosidades
Dispuesto a seguir más allá de mí ser
Recíbeme como aquel que nunca fui
No quiero más oportunidades
Quiero bañarme en las aguas de la modestia
Consciente de como vine igual me iré
quedan aquí mis versos
Juan David Porras Santana
Es un hermoso poema cubierto con la espléndida vida de todo ser vivo que habita en la tierra, acompañada de toda creación divina que la compone, muchas felicidades de la inspiración que comparte con su público
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