A Coco Santana de Porras
Mi madre es vital,
hoy cumpliría 61 años de casada
Sola, no deja
ni que el recuerdo del ido irrumpa
Siempre lo supo esperar,
el aciago reloj le clavaba las horas
Conocía del mundo baladí de sus cuitas
y lo dejo que se lo creyera , era tan infantil
pero los niños a veces sin saber son crueles
Lo vio como lo devoraba el indeseable
y apretaba con amor sus huesitos de alondra
abrazaba más fuerte que la muerte , como lo amó
y él siempre supo que ella estaría allí para amarlo
Mi padre nació como el niño Jesús con una estrella
que solo como a Cristo
lo abandonó en los cruentos estertores
Mi madre aun lo espera como la Magdalena
Lo disfruta en cada rincón de ese templo
que madre le construyó y sigue construyendo
Amaba cada rincón de una casa de rincones
eran recovecos que encendían secretas pasiones
le demostró hasta el final
que ella era irrepetible
dejandolo repetirse en falsos tentáculos
Ella lo hará como siempre, dejándolo ser
siempre amado en su único regazo
Juan David Porras Santana
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