A las mujeres que como yo
conocieron precozmente el amor
Dinástica pléyade frente a ÉL
¡Oh placer adormecedor de los equinoccios!
Mentiras urdidas para espantar al placer
Sabe ÉL que tú y yo nos comunicamos
en las dilatadas noches con susurros
que hemos pecaminosamente acurrucados
invocado a Luzbel, una y otra vez
La que todo lo sabe, la del aquelarre
odia nuestra expuesta forma de ser
El planeta oscuro que detrás de la Luna
nos sirve de paraban, ya no está
Flor carnívora, mi abejorro sobre ti se posa
Desencarna y vale el primer alfiler que penetra
hondo, en el todavía tibio corazón de Jesús
Lloramos desconsoladamente, descubiertos
su mano santa empuja nuestras manos sobre ÉL
nunca olvidaremos que pecar sangra
nunca olvidaremos a la morbosa mano que nos guía
nunca olvidaremos nuestras temblorosas manos
nunca seremos aquellos niños
de sangre verde, amarilla
Ahora y siempre seremos
roja sangre de toro
que brama en el atardecer
Juan David Porras Santana
UNA VEZ MAS IMPRESIONADA ANTE BELLO VERSO
ResponderEliminarDONDE DEJAS ABIERTO EL CORAZÓN ABIERTO ANTE
EL CORAZÓN DE JESUS,
PECANDO Y SIN PECAR. SON LOS EXCESOS DE LA FRIVOLIDAD
QUE NOS HACE SANGRAR ANTE TANTA DESFALLATÉ CUANDO
SE HACE EL AMOR.
RECIBE MIS RECONOCIMIENTO Y DESEO DE LEER TUS VERSOS
CADA DÍA MAS,
UN ABRAZO.
Bello verso literario, Nadie puede negar, pero el alfiler no se lo clavo a Jesus si no a el mismo. Quien sabe que deseos plantados en sus pensamiento lo armonizaba mentalmente y se decidio llevarlo a cabo pero Jesus se cubrio el corazon y cual no seria la sorpresa del dolor que sintio que penso que era a Jesus y fue a el quien se lo clavo..
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