La poesía no quiere adeptos, sino amantes.
Pone ramas de zarzamora y erizos de vidrio
para que se hieran por su amor
las manos que la buscan.
Federico García Lorca
Sí tan solo una mujer
por mi poesía
se hiciera mi amante
sin mediar carne y alma
sólo la palabra desnuda
Sí mi poesía expresara
con ansias la necesidad
de su amor sin entregar
nada a cambio ,
sólo la palabra desnuda
Si con cada verso estremeciera
y se sintiera descubierta
Como si en la plaza se desnudara
y no escuchara los gritos,
sólo la palabra desnuda
Fluiría esa corriente trascendente
que sólo la poesía logra
entre amantes imposibles
tan solo con la palabra desnuda
Juan David Porras Santana
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